Cuando el sol de la tarde comienza a ocultarse de la vida diaria, las tejas de aquella gran mansion se tiñen de rojo, tan solitario se ha mostrado el hogar durante tanto tiempo que el sonido de la caña de bambu que recolecta el agua es el unico que se escucha la mayor parte del tiempo, con una biblioteca llena de pergaminos y un cartel en la entrada donde se ve el escudo familiar y el apellido del clan, la residencia Sagara podria ser un lugar peligroso para quien no conoce el honor.