La galeria del placer...

-Hatori...- Los ojos de la serpiente brillaron con deseo, sus labios respondieron a aquella boca a la que ya se estaba acostumbrando y que le parecia deliciosamenet familiar - Deberiamos comer... - pidio sin mucha conviccion mordisqueando el labio inferior de su pareja.

-Pero... no has desayunado seguramente y yo tampoco...ah - cerros los ojos docilmente entregando a las caricias del medico que ya parecia conocer cada rincon de su cuerpo - aunque tienes razon... tengo hambre - una mirada peligrosa se delineo en la serpiente quien subitamente se dejo caer de rodillas, se abrazo a la cadera de su amante y por sobre la ropa beso la hombria de Hatori - Me darias de comer?

-Tal vez no sepa cocinar... pero se como servirme - Ayame se paso la lengua por los labios dejando que Hatori viera el gesto lento, despues con sus manos de mafil se libro del ziper del pantalon y del boton, dejo que el pantalon y la prenda interior de Hatori calleran hasta los tobillos de este , al ver lo que se exponia ante el sus ojos brillaron, recordaba aun la sensacion de aquel miembro dentro de el y sabia que tal vez aquello no tardia mucho en repetirse- No hagas mucho ruido amor... Akito podria escucharnos - se medio burlo con una sonrisa mientras rozaba con la punta de su nariz el glande y subia por toda aquella extencion, despues su lengua repitio el gesto de su nariz-Mhhh

-Veamos hasta donde puede aguantar mi dragon - Ayame temblaba un poco, no podia evitarlo estaba tan enamorado de aquel hombre que la sola idea de tener tan cerca lo hacia vibrar, su mano recorrio con cuidado los testiculos del medico y su lengua subio y bajo varias veces antes de que se deciera a recibir la punta de la que succiono con placer sintiendo el salado y amargo sabor como la cosa mas dulce del mundo, hacia ruidos sordos al tener la boca ocupada habia cerrado los ojos concentrandose solo en Hatori.

-creo que podria comer esto para siempre y jamas me cansaria - cuando Ayame se tomaba un instante para hablar su mano seguia subiendo y bajando, cuando volvio a tomar al medico en la boca sintio como endurecia un poco mas y aquello lo hizo gemir ahogadamente contra la calida carne - Ah tori chan....- suspiro - quiero estar siempre a tus pies... ser completamente tuyo

La serpiente estaba ya tan sofocada que tuvo que alejarse, sin previo aviso dejo libre el miembro de Hatori, se desnudo de la cintura para abajo y se a apoyarse contra la mesa de espaldas-Hatori... - Llamo con voz cadenciosa mientras se inclinaba un poco mas y el mismo separa sus gluteos dejando expuesta su entrada al dragon - Por favor... ya no aguanto mas - suplico.

-Ahh! Hatori! - La serpiente hecho la cabeza hacia atras y subio la voz mas de lo que prentendia, la fria madera de la mesa debajo suyo era un incentibo sensual, lo estaban haciendo en la cocina! y aquello era una fantasia que la serpiente jamas hubiera reconocido tener - Ah... mi amor. mi Tori chan...

La mirada dorada de nuevo tenia ese brillo embriagador como si Ayame hubiera bebido mucho saque y ahora no pudiera enfocar bien, de inmediato se abrazo de Hatori y le beso la barbilla cariñosamente.

-Esto...mmh esto se siente... aun mejor que ayerrrrr - Ayame ronroneo como un gato en su ultima frase, su entrada palpitaba aferrando el miembro de Hatori como si no quisiera sentirlo salir jamas. ante las atenciones brindadas a su pecho el peliplateado arqueo la espalda empujandose mas contra el medico - Ah... Ah

Sabia que estaba haciendo demasiado ruido pero no podia contenerse.

-Sabes...Tori chan? - Ayame hablaba entrecortadamente, el placer lo asaltaba en olas que lo asustaban y aun asi trato de seguir hablando - Ah... yo... yo jamas crei que fueras tan ah! - se detuvo un momento en el que cerro los ojos y trato de mantener el control - Jamas crei que fueras tan bueno...

La serpiente apenas y podia corresponder a los besos, Hatori era tan preciso y parecia tan experto en lo que hacia que Ayame se ahoga entre los jadeos, un poco de saliva le resbalo por la comisura de la boca al corresponder a todos y cada uno de los besos del medico - Ah si! mas! Tori chaan... te amo! te amo!

El sentimiento le quema tanto el pecho que tiene que gritarlo al mismo tiempo que el mismo busca su dureza y comienza a masturbarse - Ya no... no puedo mas ... no puedo mas por favor amor... ah... esto es el cielo... tus brazos y tus besos son mi cielo ah!

-....Dios...- Ayame aun sufre sus ultimos espasmos de placer, el producto de su orgasmo se derramo sobre ambos manchandoles un poco la ropa y el abdomen, la serpiente quedo completamente laxa tendida sobre la mesa y no pudo ocultar una lagrima que se le escapo, habia sido todo tan intenso y tan hermoso que su corazon estaba pleno y feliz - Te amo... Hatori Sohma te amo mas que a mi propia vida

-Ahm.... debiste quedarte dentro un poco mas

Ayame se quejo con una sonrisa que se le borro de inmediato cuando Hatori uso su lengua para besarlo, despues respondio al beso y solto un nuevo gemido al detectar sus sabores juntos, con cuidado se aferro del dragon y se sintio sumamente dichoso al sentirse en su cama no pudo evitar preguntarse quien habria sido la ultima persona a la que Hatori llevara a su cama y se sonrio aun mas al percibir el aroma del medico entre las sabanas - Mmh... me encanta tu colonia... y me encantan los dulces tengo tanta hambre que me comere lo que me des

-La habia notado desde el colegio pero.... tu no me hacias mucho caso

Tomo uno de los dulces y en lugar de comerlo se lo puso entre los labios y se lo ofrecio a Hatori de boca a boca.